La Policía Nacional tuvo que mediar entre la Policía Local y los taxistas. Carlos Criado
MÁLAGA
La discusión se originó cuando un agente procedía a multar en la zona de precontratados.
Un nuevo incidente entre taxistas y la Policía Local de Málaga desencadenó ayer una concentración masiva del sector que llegó a diferentes puntos de la ciudad para denunciar «el acoso que el cuerpo municipal» ejerce sobre ellos desde hace ya tiempo. La protesta comenzó en la estación María Zambrano, ampliándose después a los alrededores y más tarde fueron cientos los taxistas que con sus vehículos se dirigieron al Parque y también a la Jefatura de la Policía Local.
El incidente tuvo lugar sobre las 19.30 de ayer en el exterior de la estación de tren María Zambrano. Según explicaron fuentes de Taxi Unión a este periódico, una pareja de policías locales se dirigió hacia un taxista que se encontraba en la zona para precontratados con la intención de sancionarle. Según esta misma fuente, esa situación provocó una acalorada discusión entre el taxista y uno de los agentes. El diálogo casi llegó a algo más cuando al parecer los dos protagonistas se encararon.
Desde Taxi Unión aseguraron que la intervención de otros taxistas que se acercaron con la intención de poner fin a la bronca terminó por provocar el efecto contrario. Tanto es así, que los taxistas aseguraron que uno de los policías locales llegó a desenfundar el arma reglamentaria durante unos segundos, cuando los agentes se decidieron a pedir refuerzos. «En apenas unos minutos se han presentado entre 35 y 40 agentes de la Policía Local», aseguraban desde la centralita de Taxi Unión. Fuentes del cuerpo policial, por su parte, negaron ayer a este periódico que el agente desenfundara el arma y explicaron que sólo se informó a los taxistas de que tenían que abandonar la zona de precontratados.
La tensa situación provocó que los taxistas llamaran a la Policía Nacional de Málaga, que decidió enviar cuatro dotaciones para evitar males mayores, aunque cientos de taxistas se concentraron en la zona e interrumpieron su servicio en la ciudad. Más tarde se dirigieron al Parque para seguir con su protesta y pasadas las diez de la noche el tráfico en esa arteria de la ciudad estaba colapsado por la presencia de los vehículos, que una hora más tarde dirigieron su protesta a la Jefatura de la Policía.
Según explicó el presidente de Taxi Unión, Francisco Soria, este caso es uno más de los muchos que el sector lleva viviendo en los últimos meses, y no sólo en la zona de la estación. «El acoso se extiende por toda la ciudad y se traduce con un gran número de multas a compañeros que sólamente quieren trabajar», apuntó Soria.
Este aspecto es uno de los temas por los que el sector reclama desde hace tiempo y por lo que solicita una negociación con el Ayuntamiento de Málaga. De hecho, fuentes del área de Seguridad informaron ayer de que esta mañana se celebrará una reunión de responsables policiales y municipales con el sector del taxi para tratar de alcanzar un acuerdo.
Sanciones
El año pasado, tanto Taxi Unión como la Asociación Unificada Malagueña de Autónomos del Taxi (Aumat) denunciaron el elevado número de sanciones que acumulaban sus trabajadores, sobre todo de los vehículos policiales con cámaras: «El sector está muy afectado por la crisis y encima estamos recibiendo de 25 a 30 multas diarias por parar el coche para recoger o dejar un cliente», aseguraban.
laopiniondemalaga.es
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